Esta semana murió, a los ochenta años, el icónico Charlie Watts, una figura que contrastó su sobriedad y falta de apetito por la fama, con la extravagancia de sus compañeros en los Rolling Stones. Marcado con un corazón de jazzista, Watts fue un baterista singular. René, amigo de alta sensibilidad acústica, apunta su rasgo distintivo: […]